Quisiera quedarme quieta

Qué difícil es estar con alguien por tantos años. Hay algo que se va y no regresa.

Los sueños tienen una propiedad inasible. Son de la materia de la que imagino son las nubes: al tocarlas se deshacen

La planta parecía artificial pero estaba viva y crecía y la flor iba muriéndose y eso también era la vida, sobre todo eso, la vida: una agonía desde el principio con algo de esplendor y bastante tristeza.

LUISA VALENZUELA, “CAMBIO DE ARMAS”

La planta parecía artificial pero estaba viva y crecía y la flor iba muriéndose y eso también era la vida, sobre todo eso, la vida: una agonía desde el principio con algo de esplendor y bastante tristeza.

LUISA VALENZUELA, “CAMBIO DE ARMAS”

un libro que lee por gusto, aunque lentamente.

Le dije que dormía tan poco, últimamente, que me sentía expulsada de mis sueños. Se habían vuelto muy residuales, ansiosos, poco placenteros. No los escribía más. Escribirlos –la operación de traducirlos, con toda clase de imprecisiones– era un modo de capturarlos aunque también de degradarlos.

. Solo lo difícil es estimulante

ina y blanca como tú, le dijeron.

n calor rojo la envolvió, unas llamas vaporosas que quemaban sin dolor.

su forma ya era gatuna de por sí.