Binding 13 (Los chicos de Tommen 1)

Y pensar que Dios sustituyó a los dinosaurios por el hombre.

Una sonrisa auténtica y una personalidad agradable son más que suficientes.

, y si las chicas fueran armas, entonces Shannon Lynch era la mayor bomba atómica a la que mi corazón había estado expuesto jamás.

—Se le da fatal perder, ¿a que sí?

—¡Que no, joder!

—Sí —asentí con una risilla.

—Su padre es igual —añadió ella—. Deberías verlo cuando pierde un juicio. Sin hablar durante horas.

Literalmente, me había olvidado de mis problemas: mi ropa mojada, mis padres, mi todo, durante la última hora.

—Sí, solo tengo un poco de hambre.

«Pero ¿qué cojones, Johnny?».

—¿Te traigo algo? —preguntó rápidamente—. ¿Qué te gustaría comer?

«A ti».

«Me gustaría comerte a ti, Shannon».

Me dirigí hacia ella de todos modos.

Que les den a todos.

Hacía una hora, esa chica estaba medio inconsciente.

No iba a arriesgarme.

Me dirigí hacia ella de todos modos.

Que les den a todos.

Hacía una hora, esa chica estaba medio inconsciente.

No iba a arriesgarme.

Las embarazadas me ponían nervioso, aunque no tanto como lo hacía Shannon como el río.

«Por favor, ten diecisiete».

«Por favor, dame una alegría y dime que tienes diecisiete años».

—Tengo quince.