el miedo me abraza,
no sé qué pensar.
Las palabras se esconden,
se van a jugar,
mi voz es un susurro que no quiere hablar.
Pero miro a mis amigos,
me llenan de valor,
y en un pequeño instante,
siento su calor.
Cierro los ojos y respiro profundo,
imagino que el mundo es un
lugar muy fecundo.
Un paso hacia adelante,
un giro y ya está,