En esta colección de cuentos los personajes están relacionados de alguna manera. La coyuntura es Puerto La Cruz, hay quienes huyen de ahí mientras otros lo encuentran como su refugio.
Además, hay otros dos hilos conductores que atraviesan los cuentos: la tradición popular (con sus espíritus y aparecidos) y la violencia (una violencia bien arraigada, que está en la guerra, la persecución política y la supresión de los niños y las mujeres).
De veras que se siente todo muy genuino, pero a la vez documentado, sobre todo en las partes donde se presenta la tradición popular de otros países (japonesa y la rumana) y la ambientación en otras épocas.