Lao Tzu dice que el individuo sabio desconoce su sabiduría. La gente lo alaba y él agradece sin exaltar sus propias cualidades. Es tan humilde que si uno le pregunta, él responde que nada sabe. ésta es una actitud que conlleva un saber verdadero, es una acción y al mismo tiempo una señal. El individuo sabio ha pensado en la enfermedad del conocimiento, la ha reconocido como tal y la supera por medio de su acción meditada.