Piensa tal vez en todos los beneficios que obtendrías con algún nuevo comportamiento. Menciónale quizá todas las cosas sexis, divertidas y brillantes que hay en el lugar de destino al que quieres ir. O recuérdale al cerebro emocional lo bien que se siente después de hacer ejercicio, lo guapo que estará en bañador este verano, lo mucho que te respetas a ti mismo cuando has cumplido tus objetivos, lo feliz que eres cuando vives según tus valores, cuando actúas como ejemplo para tus seres queridos.