«Prince, en general, tiene miedo de los hombres –me comentó–. Puedes entender por qué. Imagina cómo lo trataron en la escuela: tiene que haber sido brutal. Se siente más a gusto con mujeres. Me dejó entrar en su intimidad durante tres años, y entonces tuvo miedo, incluso de mí, y para mí ésa fue una pérdida con castigo.»