Harmut Rosa

La vida cotidiana de los sujetos tardomodernos promedio en las zonas pertenecientes al denominado mundo «moderno desarrollado» se concentra y extenúa en el cumplimiento de atiborradas listas de quehaceres, y las entradas en esta lista constituyen los puntos de agresión a través de los cuales nos encuentra el mundo: las compras, la llamada a la tía enferma, la visita al médico, el trabajo, la fiesta de cumpleaños, el curso de yoga: resolver, conseguir, eliminar, dominar, borrar, cumplimentar.

Consideremos la relación con nuestro propio cuerpo. Todo lo que percibimos en él se encuentra tendencialmente sujeto a la presión de la optimización.

Desde el siglo XVIII tiene lugar un cambio estructural en todos los planos de la vida institucional de la Modernidad de cuño occidental.

si no somos mejores, más rápidos, más creativos, más eficientes, etc., perderemos

hacer visible, poner al alcance, volver dominable y volver utilizable

Sin la tríada de a←fección (en el sentido de la conmoción por un otro), e→moción (como respuesta autoeficaz a través de la cual surge una conexión) y asimilación transformadora, la apropiación no es más que una relación carente de relación

os proteccionistas y militaristas prometen protegernos

en este proceso de trabajo sobre la naturaleza el ser humano se forma y, en cierto modo, se produce a sí mismo

impulsan ciega y vacíamente los procesos de incremento

poner a disponibilidad el mundo mediante la ampliación del alcance produce efectos secundarios paradójicos.