Quizás toda flora, aun la que vive en nuestra cabeza, merece nuestro cuidado.
Ingrid Merlín Pereyrahas quoted2 years ago
Él me tomó de la mano y me dio un beso como ninguno, uno que me indicó que quería pertenecer a ese lugar, que lo tenía clarísimo. Y decidí volver a intentarlo
Lectoreandohas quoted2 years ago
una vez que sanamos, nos damos cuenta de lo que nos estábamos perdiendo por no poder ver más allá de lo que nos dolía.