Sin embargo, cuando se intenta formar en la mente una imagen total del conjunto de los productos de la imprenta hasta nuestros días, ¿no se nos aparece ese conjunto como una inmensa construcción, sustentada en el mundo entero, en la que la humanidad trabaja sin descanso y cuya cabeza monstruosa se pierde en las brumas profundas del futuro? Es el hormiguero de las inteligencias. Es la colmena a la que todas las imaginaciones, esas abejas doradas, llegan con su miel. El edificio de mil pisos.