Inmersos en Oriente Medio, rodeados de naciones que hablan árabe, situados entre Irak y Afganistán, Rusia y el Golfo Pérsico, los iraníes se expresan en una lengua indoeuropea. Generalmente, concebimos Irán como una nación homogénea, cohesionada por recios mimbres culturales, cuando lo cierto es que las minorías (azerí, kurda, jangalí, baluchí, turcomana y otras) constituyen casi la mitad de la población.