desplazamiento de más corto alcance. Pues va del yo al yo: esa sombra, que es mía, me recuerda a mí, que soy la figura opaca que se interpone entre la fuente de la luz y el puente y provoca la sombra. La virtud del poema debe buscarse entonces no tanto en ese tramo corto que va del yo al yo, sino en el uso literal, en primera instancia, de la palabra sombra y en su uso figurado, inmediatamente después