Jurásico infecta al visitante con dudas —pequeñas cosquillas de dudas— que luego continúan contaminando todos sus demás encuentros con lo culturalmente sacrosanto. (Así, por ejemplo, otro crítico, Maria Porges, en una ocasión señaló que «Wilson satiriza perfectamente las cansinas, pedantes, cualidades de “autentificar” el saber. Las abundantes notas a pie de página y referencias y paneles didácticos son ciertamente ficticios,