Juan Villoro

“Los libros sirven para recordar lo que se ha escrito pero también cosas que están fuera de los libros”.

teatro es un género literario peculiar: se escribe en un planeta y se representa en otro

La literatura es un lugar en el que llueve

este país quienes leemos en serio acabamos por conocernos tan bien que nos tememos. No es fácil prestarle libros a alguien que los ama lo suficiente para no devolverlos. Entre perder una amistad y perder un libro, cualquier bibliófilo prefiere perder una amistad.

«Los mexicanos no saben emigrar; todos quieren regresar el próximo jueves a ver a su abuelita»,

López Velarde admitía en sus poemas las pugnas favoritas de la cultura mexicana: la provincia y la capital, las santas y las putas, los creyentes y los escépticos, la tradición y la ruptura, nacionalismo y cosmopolitismo, barbarie y civilización.

La Cristiada, de Jean Meyer, el libro que durante años fue la solitaria vindicación de la insurrección católica en la academia.

una curiosa mezcla de vida bronca e infinita coquetería.

nada podía ser lógico en esa región donde los artículos de baño se exponían junto a la avenida, como si se compraran por una repentina inspiración de los automovilistas.

Iztapalapa conformaba una periferia extrema, un suburbio libre y asociado que se sometía a otras leyes, todas modificables.