Aquel mensaje de texto saltó a los foros de Internet y, de ahí, sin pasar por los medios, a las calles. Fue el desencadenante de decenas de protestas en las sedes del Partido Popular de toda España en las que se preguntaba “¿Quién ha sido?”. Eran las primeras “ciberturbas”. En Madrid, donde se congregaron entre 4.000 y 5.000 personas, las cadenas de televisión de todo el mundo, entre ellas CNN, se encontraban, en ese momento, montando sus instalaciones para la retransmisión el día siguiente de la noche electoral. Una circunstancia que favoreció que las protestas alcanzaran una audiencia global.