Yendo más allá de la primera semana de universidad, el conjunto de las experiencias de sexismo en la enseñanza superior ha creado una de las categorías más comúnmente denunciadas en el proyecto Sexismo Cotidiano hasta el momento. En 2012, el periódico del Imperial College, Felix, publicó un artículo «de broma» que ofrecía a los estudiantes varones una receta falsa para la droga que facilita los abusos sexuales en las citas, el Rohypnol, como una «forma sencillísima» para asegurarse de tener relaciones sexuales la noche de San Valentín «por un precio inferior a lo que costaría una puta». Mientras, un artículo de 2013 sobre «cazando avecillas» publicado en Tab, el periódico estudiantil de Liverpool, sugería que «si quieres ser un cabrón astuto, desliza un flunitrazepam a tu piba y métela en la cama de alguno de tus colegas», y añadía «con mucha chispa»: «Con esto no queremos decir que toleremos el uso de drogas para las violaciones en citas». Bien salvado, chicos. ¡Por un momento hemos creído que erais misóginos!