Si ella se muere antes de que yo la conozca, para mí
no habrá muerte, como tampoco hay muerte para mí cuando
un auto atropella a un desconocido.
Habrá otra cosa, habrá, si me entero, si por algún motivo
salió en las noticias —por ejemplo, si ese muerto era famoso, si
las circunstancias fueron excepcionales, si—,
empatía, o un desvío de atención momentáneo,
o, si me entrenaron bien,
un sentimiento de compasión, pero no
habrá muerte, lo que se dice
muerte, necesariamente cercana, porque la muerte
a lo lejos, la muerte
desconocida