Muchas de estas narrativas, en especial las repetitivas, generan ansiedad, ira, odio y otras emociones negativas, constituyendo lo que podríamos llamar la mente no observada. Esta actividad mental inadvertida es la responsable de la mayor parte del sufrimiento, tanto personal como colectivo, causado por el ser humano en nuestro planeta,
La mayoría de los seres humanos siguen estando, casi literalmente, poseídos por el pensamiento. No piensan, sino que el pensamiento les sucede.