Sobre el duelo

Estoy escribiendo sobre mi padre en pasado, y no puedo creer que esté escribiendo sobre mi padre en pasado.

Sin embargo, «los duelos difieren» es fácil de entender para el intelecto, pero al corazón le cuesta mucho más.

«La pena era una celebración del amor, quienes sentían auténtica pena habían tenido la suerte de amar».

Una risa que nunca volveré a reír. «Nunca» ha llegado para quedarse. «Nunca» parece un castigo demasiado injusto. Durante el resto de mi vida, viviré tratando de alcanzar cosas que ya no existen.

Me gustaba. Me gustaban su gracia y su sabiduría y su sencillez, y que resultara tan difícil impresionarle. Me gustaba su fe moderada, luminosa, firme pero llevada con naturalidad.

Y cuando llegues a Dinamarca, busca la casa de Hamlet».

Parte de la tiranía de la pena es que te priva de recordar las cosas que importan.

y comencé a hablar con él, y a adorarle. Qué exquisita su atención, qué interés, qué bien escuchaba. Si le contaba cualquier cosa, la recordaba. Su humor, siempre seco, se refinó deliciosamente con los años.

ella como una garceta!

¿Es mi padre la razón por la que nunca he temido la desaprobación masculina? Creo que sí