–¿Qué eliges? –susurró él, y aunque estaba tan lejos, ella alcanzó a oírlo con claridad. Esperanza y deseo, tanto deseo.
Los guardias levantaron sus armas y avanzaron hacia él, abriéndose paso entre la multitud desconcertada.
–A ti –le susurró Cath a su vez, y aunque su voz apenas llegaba a los propios oídos de Jest, ella vio el brillo encendiendo la mirada del joven–. Por sobre todas las cosas, te elijo a ti.