En el comienzo de las vacaciones, Marta descubre junto a su abuela una peculiar pastelería dirigida por la señorita Euforbia, quien crea pasteles únicos como podría-venirme-una-buena-idea o debo-encontrar-una-alternativa-pronto. A pesar del escepticismo de su abuela, Marta se siente atraída por el trabajo de Euforbia y se inscribe en un curso de pastelería. Durante el curso, Marta conoce a Mateo, un chico travieso, y ambos ayudan a Euforbia en una importante misión…