TODO EN UNA NOCHE

Me encanta cómo eres, sueltas las cosas tal cual te pasan por la cabeza, no intentas engañarme ni utilizarme. Tan solo… estás a mi lado. Y eso me gusta mucho

Bueno, siempre lo he pensado y me encanta la idea de crear la casa de otra persona. No sé si es mi vocación, como la música para ti, pero creo que se me da bien.

La finalidad del beso es puramente de investigación científica, ¿verdad? —dije lentamente

La casa de piedra y ladrillo apareció entre los árboles. Estaba construida al borde de un precipicio. El lugar era absolutamente increíble, impresionante, a otro nivel de la mansión de Los Ángeles. Las vistas al océano eran simplemente espectaculares

Podía hacer lo que quisiera porque pertenecía a esa esfera, yo no.

Yo no sabía qué decir. No estaba acostumbrada al amor universal y a la aceptación sin más, pero la hostilidad sin ninguna razón era un sentimiento nuevo para mí.

Se había dejado el pelo estratégicamente despeinado, un trabajo que denotaba como mínimo dos horas en una peluquería de primera. La verdad es que era muy guapa y ya por eso la odiaba un poco.

Maldita sea, ¿cómo podía haberle olvidado? No había palabras para describir la impresión que producía ese hombre en la vida real

Cerré la boca antes de que alguien se diera cuenta de que estaba alucinando. Pero es que, de verdad, era increíble

Sam se detuvo para hablar con un hombre apoyado en la pared que bebía de una botella de cerveza. Llevaba un aro de plata en la nariz, y su melena rubia le caía por la cara. Tenía el mismo aire guay de David, con unos jeans negros y una camiseta desgastada. Desde luego, la gente de dinero es para darle de comer aparte.