Tuve ganas de gritarle que me hiciera el amor, que nos casáramos, que tuviéramos un hijo o que adoptáramos a un huérfano, que compráramos una mascota y una caravana y que nos dedicáramos a viajar por California y por México, supongo que estaba un poco borracha y cansada, ese día seguramente el trabajo había sido agotador, pero no dije nada,